Los edificios de Tarragona construidos entre el 1 de enero de 1931 y el diciembre de 1950 deberán pasar este año una inspección técnica.
La Part Alta y el Barri del Port son los principales protagonistas de esta medida por ser las dos zonas de la ciudad más antiguas y con edificios más deteriorados.
La revisión y posterior petición de rehabilitación o restauración de viviendas y edificios con más de 50 y 80 años a parte de suponer una inversión económica para los propietarios mejorará la seguridad ante los episodios de derrumbamientos acontecidos en los últimos años en la ciudad.
Fuente: tarragonaradio.cat